El COLISEO
La edificación de este magnífico anfiteatro –verdadero ejemplo
de la pericia constructiva de la cultura romana- se debe a la iniciativa del
emperador Vespasiano. Con capacidad para 50 000 espectadores, el recinto
cumplía las mismas funciones de lugar de espectáculo de masas que un estadio de
futbol en la actualidad. Sin embargo, las actuaciones que allí tenían lugar
encerraban mayor peligro. Las luchas de gladiadores que el cine ha hecho
famosas no deben hacer olvidar otro tipo de manifestaciones lúdicas que se
ofrecían en el Coliseo, como recreaciones de batallas históricas y míticas, e
incluso, en ocasiones, navales, ya que, mediante un complejo artificio, una
parte de la arena podía llenarse de agua para tal fin. El edificio está
perfectamente diseñado, tanto en lo que respecta a la visibilidad desde
cualquier punto de las gradas como a la evacuación del anfiteatro en caso de
emergencia, desalojo que podía efectuarse totalmente en menos de 5 minutos.
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