EXAMEN MAMARIO.
Desde el inicio de la menstruación, las mujeres deben
examinar sus mamas una vez por mes, siempre el mismo día, ya que estas cambian
con el ciclo menstrual. Un momento ideal para hacerse el examen es una semana después
del primer día de tu menstruación. El autoexamen mamario contempla el aspecto
de las mamas y la manera en que se sienten. Debe de hacerse en dos fases:
Observación e Inspección.
Ante el espejo con los brazos extendidos a lo largo del
cuerpo o en la cintura, observa tus mamas atentamente, que sean simétricas de
igual tamaño y forma similar, que no presenten retracciones y coloraciones
diferentes; que los pezones no estén retraídos, que no haya salida de líquido
por tus pezones (excepto por la lactancia); que la piel sea lisa, sin asperezas
ni rugosidades. Repite la observación con los brazos sobre la nuca.
Palpación.
Imagina que la mama está dividida en 4 partes. De pie con
una mano en la nuca palpa cada una de las cuadrantes con los dedos de la otra mano
(la mama derecha con la mano izquierda y viceversa) explora en el sentido de
las agujas del reloj, vertical ascendente o descendente, radial hacía la
aureola; repite esta revisión acostada.
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Además de marcar en el calendario tu periodo
menstrual, señala el día de tu autoexploración.
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Revisa también las axilas y la región
superior de las clavículas buscando nódulos o bolitas.
Infórmate acerca de la manera más adecuada de preservar
tu salud, y acércate a la unidad médica de IMSS
Oportunidades más cercana a tu comunidad.
Fernanda, Octubre 2011.
